martes, 29 de agosto de 2017

¿Cuántas veces has creído en juramentos y promesas?

Simple-Mente Beatriz E. Alvarez
El escorpión y la rana. Esta fabula anónima pero atribuida a Esopo, fabulista de la antigua Grecia, nos da una gran enseñanza para explicar la conducta de algunas personas. Recordemos este relato: Había una rana sentada apaciblemente a la orilla de un rio, cuando se le acerco un escorpio que le dijo “amiga rana ¿puedes ayudarme a cruzar el rio?, ¿puedes llevarme en tu espalda? ¿Qué te lleve en mi espalda? contesto la rana, ¡ni pensarlo! ¡te conozco!, si te llevo en mi espalda sacaras tu aguijón, me picaras y me mataras, lo siento pero no puede ser”. No seas tonta, le respondió el escorpión, ¿no ves que si te pincho con mi aguijón te hundirás en el agua, y que yo como no sé nadar también me ahogaré? Y la rana después de pensarlo mucho se dijo a sí misma “si este escorpio me pica a la mitad del rio nos ahogaremos los dos. No creo que sea tan tonto como para hacerlo”. Entonces la rana se dirigió al escorpio y le dijo: “mira escorpión lo he pensado y te voy a ayudar a cruzar el rio”. Acto seguido el escorpión se coloco sobre la resbaladiza espalda de la rana y empezaron juntos a cruzar el rio. Cuando habían llegado a la mitad del trayecto, en una zona donde había remolinos, el escorpión picó a la rana. De repente la rana sintió un fuerte picotazo y cómo el veneno mortal se extendía por su cuerpo. Y mientras se ahogaba veía como también con ella se ahogaba el escorpión, pudo sacar las últimas fuerzas que le quedaban para decirle: “no entiendo nada ¿Por qué lo has hecho?, tu también vas a morir”. “Lo siento ranita, no he podido evitarlo, no puedo dejar de ser quién soy, ni actuar en contra de mi naturaleza, de mi costumbre, y de actuar de otra forma distinta a como he aprendido a comportarme” y poco después de decir esto desaparecieron los dos, el escorpión y la rana, debajo de las aguas del rio. En ocasiones los argumentos de otras personas nos engañan, cedemos ante sus peticiones. No todos somos iguales, cada persona tiene creencias, valores y costumbres diferentes, y por ello respondemos de manera distinta ante las circunstancias de la vida. Un ejemplo es la enfermedad de la adicción. Una persona enferma por la necesidad de una sustancia adictiva o alcohol, puede hacerte promesas y juramentos: “te juro que no voy a volver a emborracharme” o “no me drogare nunca más, lo prometo”, estas promesas se quedaran sin cumplir, no podrá hacerlo aunque quiera. Uno de los síntomas de la enfermedad de la adicción es la perdida de la voluntad ya que la dependencia física y psicológica a la droga o alcohol es más fuerte y no puede controlarlo. Para sanar es necesario de la ayuda profesional, familiar y de un entorno y vida saludable, sin apegos ni dependencias. La reflexión sería ¿es posible que las personas cambien? terapiabreveconbeatriz@gmail.com

martes, 22 de agosto de 2017

¿Qué induce a delinquir?

Simple-Mente Beatriz E. Alvarez
Las leyendas populares como la de Jesús Arriaga alias “Chucho el roto”, nos da una idea de cómo el entorno social puede definir a un delincuente. En el caso de Chucho el roto o también conocido como el bandido generoso, se dice que era un hombre pobre, nacido en Tlaxcala en 1858 y que se enamoró de la sobrina de un millonario de origen francés que lo mandó a la cárcel. Este hecho y el sentirse humillado, amenazado y rechazado por su condición, lo volvieron un hombre astuto, estafador y vengativo. Robaba a los ricos, participaba en las fiestas donde conocía gente rica a la que después robaba, lucho a favor de los desposeídos y se convirtió en ídolo del pueblo. Existen caracteristicas psicológicas, biológicas y sociales que intervienen en la conducta delictiva. Las frustraciones, las necesidades internas y externas que sufren las personas que delinquen; tienen una poli causalidad. La familia, la cultura, el nivel educativo, la organización social, la estructura de la política, las creencias religiosas; son causas a considerarse en el estudio de la personalidad del delincuente. El trabajo interdisciplinario de la ciencia, estudia los fenómenos delictivos a través de la medicina, la psicología, la sociología, las estadísticas y la tecnología. El delincuente criminal no puede reprimir sus impulsos antisociales. Su fantasía es consumada activamente realizando robos, secuestros, asesinatos y terrorismo. Los factores socioculturales son clave, además de las caracteristicas biológicas o genéticas y de las caracteristicas psicológicas. Los trastornos de salud mental, los desordenes hormonales a nivel cerebral incrementan la conducta violenta y antisocial. En un estudio en Dinamarca, se vio como la esquizofrenia o el desorden de personalidad antisocial aumenta la conducta homicida en hombres y mujeres. Hay mas convictos en las cárceles con desordenes psiquiátricos. Dentro de las caracteristicas sociales tenemos que el nivel educativo, el desempleo, el pandillerismo, la desigualdad económica puede llevar a incrementar la violencia criminal. El delincuente se hace. Escuchamos cada día un evento violento, de odio o venganza. El empeoramiento de las condiciones de vida hace que las personas piensen más en “tener” antes que “ser” viven dentro del mito del bienestar “se es más, cuanto más se tiene”. Las sociedades se defienden a través del miedo en su vida, en la calle, hacia el futuro y presentan al delincuente como un “monstruo” en lugar de una persona humana, con necesidades que atender, ya sea biológicas, psicológicas o sociales. Los castigan con la muerte o en las cárceles, sin entender las causas profundas de la delincuencia. Las sociedades requieren de nuevas formas para la solución de conflictos sin violencia y para poder dar fin a estas expresiones de frustración, enfermedad y miedo. terapiabreveconbeatriz@gmail.com

martes, 15 de agosto de 2017

¿Abusas de los somníferos?

Simple- Mente Beatriz E. Alvarez
La historia clínica de Luz inicia cuando visita al psiquiatra y le platica que tiene más de dos meses que no puede dormir bien, que tarda en conciliar el sueño y éste es ligero, despierta en la madrugada y ya no se vuelve adormir. Al día siguiente tiene que ir a trabajar, se siente cansada y de mal humor. Ya empezó a sentir sudoración, palpitaciones y miedo a morirse. “Por diagnósticos erróneos, 50 por ciento de los pacientes que sufren trastornos del sueño crean una dependencia a los fármacos, principalmente a los somníferos que algunos médicos prescriben sin controles rigurosos”, aseguró el especialista en Biología Experimental de la Universidad Nacional Autónoma de México UNAM, Ulises Jiménez Correa. Las personas lo que quieren es solucionar su problema y creen que tomar pastillas les va a ayudar, desconocen que les puede ocasionar otros problemas de salud, peores. Las consecuencias de tomar somníferos repercuten en la vida de la persona: accidentes de tránsito por somnolencia, bajo rendimiento escolar o en el trabajo, y problemas nerviosos. Además de la dependencia a los fármacos. En muchas ocasiones las causas del problema son hábitos inadecuados de sueño y alimenticios, estrés físico y mental, ansiedades por no tomar decisiones, falta de ejercicio. Existen otras formas de tratar los problemas del sueño (insomnio, ronquidos, apnea del sueño, somnolencia) “…porque el abuso de fármacos por parte de los médicos y el paciente está aumentando la incidencia”. Ulises Jiménez Correa, especialista del sueño UNAM. En la consulta terapéutica, he obtenido éxito para resolver este tipo de trastornos, devolviendo a las personas el sueño reparador y dejar de consumir somníferos. A continuación algunas sugerencias, que si se llevan a cabo, ayudarán a resolver el problema: La práctica cotidiana de técnicas de respiración y relajación, hacer ejercicio o practicar yoga y meditación, cambio de hábitos alimenticios ejemplo: no consumir estimulantes (café, chocolate, refresco de cola, alcohol, drogas) y usar aromaterapia para obtener efectos físicos y emocionales favorables. Evitar ver o escuchar los noticieros antes de dormir y al despertar, las tabletas y móviles estropean el sueño, evitar tener la televisión y aparatos electrónicos en la habitación donde duerme, resolver los “pendientes”, tener una libreta y pluma en el buró y escribir cualquier pensamiento que aparezca ya sea antes de conciliar el sueño o si despierta a media noche. Uno de mis placeres es dormir de ocho a nueve horas diarias, tú también puedes disfrutar el descanso y sentirte bien durante el día, tener la energía para trabajar o estudiar, ser creativo y gozar de un estado de ánimo que te haga sentir tranquilo y motivado. terapiabreveconbeatriz@gmail.com

martes, 8 de agosto de 2017

Dejar de postergar, el complejo de Penélope.

Simple- Mente Beatriz E. Álvarez En la mitología griega, Penélope era la mujer de Ulises, que tejía y destejía siempre la misma tela para evitar casarse con los pretendientes al reino insular de Itaca mientras esperaba que volviera Ulises. El complejo de Penélope, (la expresión fue acuñada por la psicoanalista austriaca Marie Langer) habitualmente asociado a la mujer, pero no exclusivamente, es en psicología, aquel, en que la espera se transforma en una constante existencial en la vida de algunas personas. Un complejo paralelo, pero referido a los hombres, es el llamado complejo de Ulises. Es posible que las personas que retrasan sus actividades o situaciones que deben atender, tengan un impacto en su bienestar afectivo. Yo no sé si tú conoces a alguien o seas tú mismo, quien tiene el hábito de sustituir sus deberes por otras actividades más irrelevantes, pero que son más agradables. Conozco personas que viven con tensión constante, que les gusta hacer todo en el último minuto y que en ocasiones tienen “suerte” y todo les va bien. Tal vez reciben ayuda de su familia, amigos o hasta en el trabajo encuentran quién les resuelva lo que ellos mismos no resuelven. En este país, las conductas de aplazamiento se dan en todos los ámbitos. “lo dejamos para mañana”, “después lo vemos”, “hoy ya no se pudo”, y así se pueden pasar los años. Estas conductas se auto justifican, posponer a futuro lo que es difícil, tedioso, aburrido o peligroso; es subordinado a lo urgente. Podríamos decir que la voluntad de estas personas se ha perdido, no se atreven a hacer cambios, evitan el dolor o la incomodidad. La facultad de decidir y ordenar la propia conducta no se expresa de forma consciente, no hay una intención de realizar algo con buen resultado. Sin embargo también puede ser un síntoma de algún trastorno psicológico como la depresión, o el trastorno por déficit de atención con hiperactividad TDAH. Superar el habito de posponer, es el título del libro de William Knaus (investigador), que nos da una serie de caracteristicas de las personas con tendencia a la postergación: Tienen una pobre autoimagen y autoconcepto (elementos de la autoestima) que les hace creer que son incompetentes, ven el mundo con demasiadas exigencias que no son capaces de cumplir. También pueden ser personas perfeccionistas y que tienen miedo al fracaso. Son personas autoexigentes, que se marcan metas poco realistas. Prefieren las tareas donde hay garantías de éxito. Sufren de ansiedad y tienen pensamientos catastróficos. Se les dificulta tomar decisiones. Se sienten indefensos y sienten autocompasión. Tienen accesos de ira e impaciencia, vienen pensamientos como ¡qué idiota soy! terminan atrapados en un círculo de enojo-rebelión que empeora su rendimiento. Posteriormente viene la necesidad de sentirse querido, basan su valía como persona en la aceptación y atención recibida. Se sienten fuertes si se les recompensa o se sienten personas inválidas, cuando no obtienen lo que desean, por este motivo aceptan las demandas de los demás con el fin de agradar. Son incapaces de establecer prioridades, el trabajo se les acumula y esto les provoca ansiedad, estrés, angustia, indecisión, impotencia y fracaso. Es un círculo vicioso del que no pueden salir. Si te has identificado con varias características de las personas que postergan, puedes tener un problema de autoestima y por esa razón evades por miedo al fracaso. Si postergas tus tareas hasta que ya no hay más remedio que realizarlo tienes un problema de activación. Si eres indeciso entonces te pierdes pensando la mejor manera de hacer las cosas. Te invito a sentir la satisfacción de adelantar los éxitos ¡empieza ahora! terapiabreveconbeatriz@gmail.com