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martes, 9 de agosto de 2016
¿Por qué se acepta el maltrato?
La semana pasada analizamos las motivaciones del maltratador a partir de la pregunta ¿Por qué se da una relación de maltrato hasta llegar a la crueldad? En esta ocasión vamos a averiguar ¿Cómo es que se mantiene la relación de maltrato? Cuando una persona tiene la autoestima dañada, prefiere el maltrato a la soledad. La persona maltratada hace hasta lo imposible, por no perder a su maltratador, es capaz de contradecirse, para no perderlo. ¿Por qué se acepta el maltrato? por temor a no ser nada. La víctima está tratando de explicarse el maltrato a partir de ella, el maltratador le dice “es que tú me haces enojar” “es que tú haces las cosas mal”, la víctima acepta la razón del agresor y esto la hace perder objetividad, trata de “encontentarlo”, sigue allí favoreciendo la conducta maltratadora. La persona maltratada comienza a presentar síntomas como: estados de tristezas frecuentes, apatía, desconsuelo, llanto, descuido; o agresividad, intolerancia y baja autoestima; dando por resultado un estado tan bajo de energía y de voluntad que pareciera que no se puede salir de esa relación. Imaginemos a una joven mujer que se enamora, y se dice: “aquí está mi felicidad” y como resultado se adhiere a una persona maltratadora, que sin ella no puede ser feliz. Posteriormente recibe un flechazo de violencia, y piensa “algo malo hice” y se hace responsable de los arranques del agresor, de esta manera van aumentando las agresiones y disminuyendo los momentos de gentileza, de educación, de cercanía. La víctima va perdiendo capacidad para distinguir las conductas de maltrato. Conforme va avanzando el maltrato, la persona maltratada tiene menos recursos para conocer lo que está sucediendo. Cada vez se siente más confundida, es más vulnerable, la víctima va empeorando progresivamente hasta la desesperanza. Algunas conductas que aparecen en la víctima de maltrato: va perdiendo la espontaneidad, no sabe cómo actuar y está continuamente incierta. Se pierde la espontaneidad porque la víctima está siendo culpada continuamente y está buscando la conducta adecuada, para no provocar la ira del maltratador. Si una persona es muy defensiva sin que antes lo fuera, es muy probable que sea víctima de maltrato. A veces, esta defensa se hace de una forma enmascarada, por ejemplo: explica todo lo que hace, pide perdón continuamente, piensa que actúa mal. Lo importante es que cada día hay más información, investigaciones, leyes que protegen y profesionales para ayudar tanto al maltratador como a la persona maltratada, para poder salir de esa dinámica de maltrato. ¿Estás inmerso en una relación violenta y sigues ahí sin saber qué hacer?, pide ayuda.
Fuentes: Balderas Octavio. Maltrato. ITESO 2003. Solís Gadea Héctor Raúl. Reflexiones para una epistemología de la violencia. CUCSH, Universidad de Guadalajara.
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