Beatriz E. Alvarez Barrón
4 de septiembre, 2019
“El
verdadero perdón no niega que en
el nivel
del ego una persona
haya
intentado herir a otra,
sino que
enseña que
hay otra manera de percibir
esta acción”
Kenneth
Wapnick.
La
inconformidad que muchas personas sienten hacia sí mismas, a como se ven, a sus
sentimientos, a lo que se dicen o a lo que piensan de otros, se debe al poco
amor propio que tienen, a que no se sienten amadas. No se trata del cuerpo, de
un dolor o enfermedad, es la mente la que está inconforme, los pensamientos de
minusvalía, de temor constante, de crítica hacia sí misma o hacia sus padres,
sus hermanos, su jefe o compañero de trabajo o escuela.
El sentimiento de
culpabilidad puede estar presente o no, la culpa inconsciente se manifiesta a
cada momento y se desconoce su causa. Es hasta que se toma consciencia al
iniciar un proceso de terapia o cuando tienes una conversación sincera contigo
misma o con un amigo, mentor o guía que aceptas estos sentimientos.
La causa de la culpa inconsciente
es importante hacerla consciente en la medida que para ti sea importante, sin
embargo se puede cambiar tu estado actual por uno que sea más apacible y
placentero aún que no compartas con otros tu experiencia. La llave para abrir
la puerta de la paz y la tranquilidad dentro de tu mente y tu corazón está en
el perdón. En perdonarte tú a ti.
Algunas personas pueden
decir “yo si se perdonar” o “yo eso no lo perdono” la pregunta es ¿desde donde
se da o se acepta el perdón? Si la actitud de perdonar es desde la arrogancia y
el ego: “te perdono porque yo soy mejor que tú” “te perdono porque soy buena y
tu no” entonces ese perdón no surte su efecto, se da desde la superioridad no
desde el amor y la bondad aceptando al otro como igual, con errores como los
que cometemos todas las personas.
El perdón que otorgas a
otro, mejor dicho a ti mismo es el perdón por juzgar o juzgarte, por creer que
te atacaron o atacaste, por el daño que crees te hicieron o hiciste. Cuando te
das cuenta que todo lo que crees que sucedió es solo una historia que te
contaste a ti mismo, que tu ego te hizo creer y que tu reafirmas cada vez que
platicas o te lo dices recordando un hecho que quizás sucedió cuando eras niño
o de joven, o ayer mismo.
Ese instante ya no existe
pero tú lo “atrapas” en tu mente y lo repasas y recuerdas con detalle a cada
momento para alimentar el odio, el resentimiento, el temor y así no dejar que
entre en tu mente y en tu espíritu el descanso que da el perdón.
Puedes volver a amar
conscientemente a esa persona que crees tu enemigo (tu padre o madre, esposo,
amigo o vecino) no importa de quien se trate. El perdón se aprende.
Impartiré en el mes de
octubre (sábado y domingo 26 y 27 de octubre, 2019) con una duración total de
16 hrs. un taller presencial para que “te perdones tú a ti” aprenderás este método inspirado en el libro “Un Curso de Milagros” para que puedas enseñarlo y ayudar a
otras personas. Estaré compartiendo los requisitos, el propósito y el contenido
del taller más adelante.
Para
mayor información y preinscripción (cupo limitado): nasacurartetubeatriz@gmail.com,
Facebook inbox: Beatriz Alvarez Barrón
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