Simple-Mente
Beatriz
E. Alvarez
Las
personas como yo que nos hemos dedicado a buscar por todos los medios la propia
salud, la de otras personas y a desear la de la humanidad entera, recorremos
distintos caminos en donde vamos encontrando herramientas poderosas y también
obstáculos disfrazados de creencias. Hay que cambiar las creencias que nos
impiden sanar y curarnos.
Quién
no ha intentado corregir su estado a través de consejos, vitaminas, elixires,
hormonas, jugos, dietas, flores, tés, medicina alópata, homeopatía, masajes,
limpias y una enorme lista de remedios; y no toma consciencia de lo que está sucediendo con
sus emociones. “…Todas las enfermedades
tienen un componente emocional que abona terreno para que surja el
desequilibrio físico” (Veturián Arana, terapia de desbloqueo integral).
Recapacitar
acerca de la relación entre lo que se siente y la expresión física, es la llave
para abrir las posibilidades de sanar. Las enfermedades no siempre tienen que
ver con las mismas emociones. Hay mucho más… Como ejemplo están las alergias:
hay que ver en que parte del cuerpo aparecen, cuánto dura, como se muestra y
checar que emociones están apoyándola.
Para
liberarse de las enfermedades hay que usar todo el potencial que se tiene en el
presente. Existen técnicas para la transformación personal que ayudan a mejorar
la salud, las relaciones
interpersonales, familiares y laborales, y a tener bienestar y armonía en la
vida y en el entorno.
Como
consultora profesional encuentro cada día una diversidad de síntomas y
padecimientos en las personas que buscan mi ayuda (guía). Hay que ver más allá
de lo que el ojo ve a simple vista o el oído escucha. Es inevitable la
interpretación pero ésta obstaculiza, interfieren las propias creencias y
limita la ayuda terapéutica.
La
intuición o habilidad para conocer, comprender o percibir de manera clara e
inmediata sin la intervención de la razón, tiene mejores resultados. Además de descubrir
las creencias y las emociones que hay detrás de la enfermedad. Puede ser
resistencia, tensión, culpa, miedo, carencias de alegría, emociones reprimidas,
huida de sí mismo, no saber amarse.
Sanarse
a sí mismo corrigiendo las creencias limitantes cambiándolas por otras en las
que el conocimiento y el amor llenan los vacios, da mejores resultados que ir a
la farmacia y llenar una bolsa de medicinas como cuando eres niño y sales muy
contento de una tienda con las manos llenas de dulces.
La
capacidad de dejar el pasado y asimilar lo nuevo , expresarte y ser creativo es
una de las soluciones para sanar y ver lo bueno que hay a tu alrededor, aún en
medio de los problemas. Buscar un apoyo para este proceso es recomendable. El
acompañamiento ayuda.
terapibreveconbeatriz@gmail.com
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