Simple-Mente
Beatriz E. Alvarez Barrón
Es posible que una persona
o una colectividad compartan un sistema
de pensamiento que le haga creer en una realidad y que otra persona o colectividad
que tiene otro sistema de pensamiento vea otra realidad.
El Mito de la Caverna de
Platón es una analogía sobre la realidad de nuestro conocimiento, mostrando en
sentido figurativo como la vida nos encadena mirando hacia la pared de una
cueva, desde que nacemos y, cómo las sombras que vemos reflejadas en la pared
componen nuestra realidad.
Cada persona tiene sus
propias proyecciones que hablan solo de esa persona, de su mecanismo de juicio,
de lo que valora y de su sistema de creencias. El cuerpo está unido a la mente
y cada célula responde a tus miedos. Lo que piensas se refleja frente a ti y
crees que todas las personas sienten lo mismo que tu. El mundo que ves lo estas
construyendo a cada instante y cada persona construye su mundo.
El miedo es una emoción, se
siente ante la presencia de un peligro real o imaginario y es provocado por tu
mente. También se dice que el miedo permite alejarte del peligro y que te ayuda
a sobrevivir. Cuando la sensación de miedo es constante, es provocada por los
pensamientos que permanecen en tu mente y puede bloquearte y paralizarte.
Para pasar del miedo al amor
hay que cambiar el sistema de pensamiento “tú
creas tu realidad”. Hay que eliminar el miedo y todos los temores que se
proyectan a partir de él.
El amor es un sentimiento
que provoca la unión, la aceptación y la paz dentro y fuera de ti. El amor es
temible cuando se cree que puede dañar a partir de experiencias pasadas “traumas emocionales” que quedaron
grabados en el inconsciente y esta experiencia regresa ante un estimulo como si
fuera el tiempo presente.
La mente no reconoce el paso
del tiempo, es por eso que algo que te causo daño en la infancia, al recordarlo
lo vives como si estuviera sucediendo en ese momento. Puedes volver a sentir
enojo, miedo, tristeza, dolor o cualquier otra sensación al revivir la
experiencia raíz del trauma.
¿Cuál es tu sistema de
pensamiento? presta atención a tu mente y a la proyección que haces a partir de
tus pensamientos. Las enfermedades, la violencia y todos aquellos males que ves
y que sientes; son producto de tu mente.
Hay que cambiar la fuente de estas proyecciones para que se reflejen otras más
placenteras y saludables.
Para experimentarlo,
recuerda un evento en el que te hayas sentido plenamente segura y amada (como
persona) sin importar el lugar o la edad que tienes y date cuenta como
respondes a ese recuerdo.
Cada persona tiene el poder
de decidir qué mundo crea y en qué mundo quiere vivir. Para sanar la propia
mente y que las sociedades que han creado miedo, violencia, separación y
guerras puedan sanar; hay que cambiar de sistema de pensamiento y dejar de ver
reflejada en la pared las sombras de tu vida encadenada dentro de una cueva.
Twitter: @beatricealvare9
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